Bueno, parece ser que esta fundación esconde un papel extremadamente sutil en el correcto desarrollo de las asignaturas de importancia de esta nuestra universidad. Me gratifica saber que aun existen alumnos que buscan el enriquecimiento del alma pura del ser humano mediante materias tan sofisticadas como es la fundación de la que han hecho gala. Han demostrado ser más rápidos k el señor k trato de imitar en la cama!!! XD k viva bertuuuus, ese puto amooooo!!!
Bien, bien, bien. Parece ser que esta Fundación, Asociación, o cosa extraña esconde en su interior un fin moral, como toda acción humana según nuestro querido Kant. El sistemático Immanuel Kant nunca salió de Köhnnigsberg, su ciudad natal, y siempre deambulaba de clase a casa y de casa a clase. Además, estaba tan entretenido con el estudio de la metafísica de las costumbres que más de una vez marcaba las páginas con la tortilla que su cocinera le llevaba al lugar de trabajo (Beaumont, 2006a) Pero ese no es el caso: el caso es que este fin didáztico, que dirían los modernos, está muy bien, y como está muy bien le voy a dar mi beneplácito, lo cualo (Pascualo) es de una imnportancia tan sublime que exijo que una de estas dos medidas siguientes sean tomadas por los irresponsables que dirigen la Cosa esta que nos trata: ora presentar ante el Congreso de los Diputados una propuesta de reconocimiento legal y de plenos derechos sociales, políticos y sindicales de las bacterias, ora sucumbir todos ante la incongruencia de sus reclamaciones, no sin antes tirarse por los acantilados de la más cruda Siberia. Exijo, que no propongo, también, que dejen de abrirse viejas heridas entre las bacterias, las cualas (Pascualas) llevaron a nuestras queridísimas hermanas a una Guerra Fratricida que enfrentó al bando Gram + (aka las débiles) con las Gram - (u las impenetrables). Basta ya de hipocresía. El relativismo moral es el cáncer del siglo XXI, y más aún con esta juventud maligna que niega la existencia del pecado, y que encarna los valores de la Concupiscencia (Beaumont, 2005). Por último, no quisiere acabar este comunicado sin afirmar que la juventud que tan denostadas tiene a las bacterias, amigas mías y del Niño Jesús, gusta de pintar en los muros de la ciudad frases tales como "No temo a la muerte, porque cuando yo soy ella no es, y cuando ella es yo ya no soy" (Beaumont, 2006b)
Bibliografía: Beaumont, M. (2005): "Platón, el amigo de los niños". Beaumont, M. (2006a): "Immanuel Kant: un humanista ilustrado". Beaumont, M (2006b): "Epicúreos. estoicos y demás herejes".
el sujeto que ha escrito ese comentario rimbombante deberia abstenerse de repetir la experiencia debido a que como le localice no sólo voy a gozar partiéndole las piernas sino que le sacaré los ojos con una peonza, además de ponerle el cuello a osca
7 comentarios:
Bueno, parece ser que esta fundación esconde un papel extremadamente sutil en el correcto desarrollo de las asignaturas de importancia de esta nuestra universidad. Me gratifica saber que aun existen alumnos que buscan el enriquecimiento del alma pura del ser humano mediante materias tan sofisticadas como es la fundación de la que han hecho gala. Han demostrado ser más rápidos k el señor k trato de imitar en la cama!!! XD k viva bertuuuus, ese puto amooooo!!!
what's up??? que wapo has dejado a Pablo jeje ahora te atacara con silogismos hasta dejarte k.o
bno ps nada a ver si sigue la fundacion ayudando a esos jovenes estudiantes y ayudando a las bacteriass ....
pd: la proxima foto de xurro y angelito ! xD o de fastman el hombre casi rapido
viva la fundacionnn ,por una cancion nueva y un mundo bacterio :) xD (se me fue la pinza)
que fimre kapilll !!!
Bien, bien, bien. Parece ser que esta Fundación, Asociación, o cosa extraña esconde en su interior un fin moral, como toda acción humana según nuestro querido Kant. El sistemático Immanuel Kant nunca salió de Köhnnigsberg, su ciudad natal, y siempre deambulaba de clase a casa y de casa a clase. Además, estaba tan entretenido con el estudio de la metafísica de las costumbres que más de una vez marcaba las páginas con la tortilla que su cocinera le llevaba al lugar de trabajo (Beaumont, 2006a)
Pero ese no es el caso: el caso es que este fin didáztico, que dirían los modernos, está muy bien, y como está muy bien le voy a dar mi beneplácito, lo cualo (Pascualo) es de una imnportancia tan sublime que exijo que una de estas dos medidas siguientes sean tomadas por los irresponsables que dirigen la Cosa esta que nos trata: ora presentar ante el Congreso de los Diputados una propuesta de reconocimiento legal y de plenos derechos sociales, políticos y sindicales de las bacterias, ora sucumbir todos ante la incongruencia de sus reclamaciones, no sin antes tirarse por los acantilados de la más cruda Siberia.
Exijo, que no propongo, también, que dejen de abrirse viejas heridas entre las bacterias, las cualas (Pascualas) llevaron a nuestras queridísimas hermanas a una Guerra Fratricida que enfrentó al bando Gram + (aka las débiles) con las Gram - (u las impenetrables). Basta ya de hipocresía. El relativismo moral es el cáncer del siglo XXI, y más aún con esta juventud maligna que niega la existencia del pecado, y que encarna los valores de la Concupiscencia (Beaumont, 2005).
Por último, no quisiere acabar este comunicado sin afirmar que la juventud que tan denostadas tiene a las bacterias, amigas mías y del Niño Jesús, gusta de pintar en los muros de la ciudad frases tales como "No temo a la muerte, porque cuando yo soy ella no es, y cuando ella es yo ya no soy" (Beaumont, 2006b)
Bibliografía:
Beaumont, M. (2005): "Platón, el amigo de los niños".
Beaumont, M. (2006a): "Immanuel Kant: un humanista ilustrado".
Beaumont, M (2006b): "Epicúreos. estoicos y demás herejes".
La persona k ha exo el último komentario debería haber permanecido en el anonimato, sin keria preservar su dignidad. XD
Suscribo a mi compañero: debiera de haber permanecido en el economato.
el sujeto que ha escrito ese comentario rimbombante deberia abstenerse de repetir la experiencia debido a que como le localice no sólo voy a gozar partiéndole las piernas sino que le sacaré los ojos con una peonza, además de ponerle el cuello a osca
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